Chubut: El coordinador jurisdiccional del INCUCA en la provincia explicó la nueva Ley Justina

Todo lo que hay que saber sobre ser donante a partir de los 18 años.

El coordinador jurisdiccional en Chubut del INCUCA habló de la nueva norma. Si bien se dispone que todos los mayores de 18 años puedan ser donantes, no es obligatorio. Respalda la donación cruzada.

El 4 de julio se aprobó por unanimidad la “Ley Justina”. Sus artículos excluyentes indican que toda persona mayor de 18 años se convierte en donante de órganos excepto que exprese su voluntad de no serlo. No todos pueden ser donantes multiorgánicos. Debe existir la muerte encefálica. Habrá que equipar hospitales y capacitar médicos.

Además se respalda el “trasplante cruzado”: dos personas con un vínculo entre sí que no sean compatibles, pueden cruzarse con quien esté en lista de espera y sí lo sea. Es una modalidad que permite que un paciente que tiene un potencial donante vivo no compatible aún así reciba un trasplante de otra persona.

Hoy, 4 de 10 ciudadanos dicen “no” a la donación. Se informará sobre el tema y se pretende bajar el número de pacientes en lista de espera que por lo general, fallecen esperando su órgano. Actualmente hay 11 mil en Argentina.

El coordinador jurisdiccional en Chubut del INCUCAI, Sebastián Kidd, clarificó en una entrevista con Jornada los alcances de la flamante normativa. Advirtió que la Ley Justina (impulsada por el papá de una nena que murió esperando un corazón) tiene muchos artículos y puntos destacados.

Dijo que es mucho más abarcativa que la que estaba en vigencia. “Nosotros teníamos la “ley del donante presunto”. Esto significaba que todos éramos donantes. Si no habíamos dicho Si o No, éramos donantes. Pero quien determinaba finalmente la decisión era la familia. Hoy en día es un donante duro. Todos somos donantes a partir de los 18 años salvo que digamos lo contrario”.

No es una norma estricta y mucho menos obligatoria. Cada persona que no esté de acuerdo en donar sus órganos, sólo debe dejarlo expreso. Los canales legales que recibirán la voluntad de la gente de “no donar” son el Registro Civil, Correo Argentino y el INCUCAI a través de su página o del 0800. Es un trámite rápido y fácil.

“Son las únicas armas legales para decir que no. No sirve el registro de conducir, por ejemplo. Tiene que estar atenta la persona para que si no quiere ser donante, lo manifieste por esas vías. Pero -reveló Kidd- si quiere manifestar la decisión de Sí ser donante igual lo puede hacer, deja más tranquila a la familia”.

Por otro lado, las entidades competentes están trabajando en el tema. Explicó Kidd que la guía sobre las flamantes normativas se basan en la Sociedad Argentina de Trasplante, el INCUCAI y la Sociedad Argentina de Nefrología. La reglamentación está siendo procesada a través de profesionales miembros de dichas instituciones.

Trasplante cruzado

La Ley Justina también respalda el trasplante cruzado. “Ante la imposibilidad por ejemplo, de una pareja que la esposa le quiera donar el riñón al esposo y no se puede, se cruzan con listas con posibles donantes y el proceso puede ser exitoso”.

Lo que se tratará de hacer para la implementación de esta ley, tal como lo explicó el prestigioso médico a Jornada, es crear en todos los hospitales públicos personas capaces para captar donantes y estar presentes en los procesos de ablación y procuración. “Esta disposición es beneficiosa dado que en los hospitales tenemos déficit porque tenemos coordinadores hospitalarios cubriendo menos de un tercio de todos los posibles hospitales” dijo.

Destacó además Kidd que “hoy en día tenemos cubierto solamente el hospital de Trelew y de Comodoro Rivadavia. Ya hablamos con el subsecretario de Salud para incluir el resto de los hospitales para que tengan un posible coordinador que se encargue de tratar de conseguir y captar los posibles donantes”, reveló.

La flamante normativa obligará a los médicos a someterse a una capacitación permanente. “Se va a destinar un monto que maneja el INCUCAI hacia la capacitación permanente de los profesionales . Tiene muchas cosas positivas. Se trata de reglamentar también cómo dar la información en la prensa. Cómo respetar anonimato del donante y receptor. A lo mejor muchas veces por darla, violamos los derechos de los donantes. Excepto que la familia lo avale y se manifieste de esa forma, que quiera expresarlo. Desde el INCUCAI y periodistas tenemos que respetar el protocolo” sentenció.

“Nadie está obligado”

Kidd fue claro en explicar que por más que exista esta Ley, nadie está obligado a donar órganos. “Hay mucha gente que puede estar en desacuerdo y hay que respetarlo. A lo mejor habrá 20% de la población que dice que no y está bien, hay que respetarlo. Es importante seguir informando a la población y explicando lo que es ser donante”, remitió.

No obstante, consultado sobre la idea que ronda en la gente respecto a que todo quien fallezca será donante multiorgánico, explicó que “no es así”. Remarcó que “no todos pueden ser donantes multiorgánicos. Si, lo que nos podemos llegar a convertir la mayoría es en donantes de tejidos. Hay que contar con infraestructura. No lo vamos a conseguir de un día para el otro. Hay que hacer capacitación. Capacitación de profesionales y se necesitan las inversiones económicas para poder llevar esta ley adelante”.

Fue conciso Sebastián Kidd en recordar que esta ley se aprobó en forma unánime. Además es la misma sociedad la que la impulsó. “No lo impulsó el INCUCAI vino desde la sociedad. Un padre ante el fallecimiento de su hija movió lo que pudo para conseguir esta ley hay que darle respuesta a la sociedad y a quienes están en lista de espera, ese es el fin”.

Es cierto que las expectativas para salvar más vidas a través de esta reglamentación, son altas. Kidd expresó que “hoy tenemos entre un 30% y 40% posibles donantes que la familia que dicen que no. Es decir 4 de cada 10 personas dicen No. Tratamos de bajar ese número. Si la familia va a ser desconsiderada hay otras probabilidades. Si la persona no dijo No, va a ser donante. La familia por ley no tendría la posibilidad de negar la donación. Ahí está el numero que nos va a mejorar la estadística. Pero yo creo que nos mejorará la estadística, capacitar profesionales en hospitales públicos para todo el país”.

¿Todos podemos donar?

Respondió la pregunta de miles de personas: ¿todos podemos ser donantes multiorgánicos?. Y la respuesta de Kidd fue no.

“Tenemos que llegar a tener una muerte encefálica. Que la muerte encefálica es el proceso irreversible de la función neurológica. Son casos muy específicos: un accidente cerebro vascular ACV hemorrágico o masivo que no se produce normalmente. Muchos tienen uno parcial, una intoxicación por monóxido severo; traumatismo de cráneo grave, que luego de cirugía no se puede recuperar, una herida de arma de fuego, etcétera. No son cosas comunes. No todos llegamos a serlo. En el camino pueden pasar muchas cosas. La probabilidad es baja. Hay que trabajar cuando están esos posibles donantes y hablar en buenos términos a la familia para que entiendan” describió.

Pero por sobre toda posibilidad de que una persona sea potencial donante, está el trabajo previo del médico cuya prioridad es salvar la vida de ese paciente. Sobre esto no debe caber duda.

“No caben discusiones en la función del médico. Siempre se prioriza la vida. Tratamos de salvarla. Es imposible que pensemos que llegue a muerte encefálica. A los médicos nos formaron para salvar la vida. Cuando se nos agotan los recursos, recién ahí hablamos de muerte encefálica. En ese momento le explicaremos que el paciente se convirtió en donante de órganos”, expresó.

Habló de números. “Hay 7 mil personas esperando un órgano. Si sumamos tejidos, 11 mil. Fallecen casi siempre en lista de espera” dijo con desazón.

Los operativos de ablación en Trelew en lo que va del año, en forma exitosa, superan las estadísticas de años anteriores. Las cifras no dejan de satisfacer a Sebastián Kidd como referente del INCUCAI en la zona.

Entiende que al poder realizarse estas ablaciones, significa que “está llegando el mensaje. Hemos tenido donantes que dijeron Sí en vida. Ya es fácil para nosotros. La familia respeta, no cuestiona, respeta la voluntad de la persona y es más fácil. Ya superamos el año pasado en números. En Comodoro Rivadavia se hacen ablaciones de tejidos, hay otra persona mas trabajando allí”.

El país habla de una cifra que lleva a la reflexión. Se escuchó decir que ya más de un 1 millón de personas habrían dicho “No” a la donación de órganos. Kidd, ante esta información, refirió que “se tomaron números registrados anteriormente a que salga la Ley”. Admitió que un día posterior a la jornada de la aprobación de la norma se sumó un numero importante que se negaron a ser donantes pero que luego bajó considerablemente. “Las expresiones positivas serán más que las negativas. Y si la gente dice que no, está bien. Es una decisión. Hay que darle la información a las personas para que tomen la decisión a conciencia”.

Para finalizar, es válido destacar que en la vida de una persona, las posibilidades de recibir un órgano son mayores a las que se presentan de tener que ser donante. La situación amerita una clara reflexión. La decisión, sea cual fuese, es respetada y la ley también lo contempla. #

Recibirán la voluntad de “no donar” Registro Civil, Correo Argentino y el INCUCAI a través de su página o del 0-800. Es un trámite rápido.

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