Tras ser descubierta, terminó abonando lo sustraído con una tarjeta de crédito.
El hecho ocurrió este viernes en una sucursal céntrica de La Anónima de Esquel, en circunstancias que una mujer de unos 35 años ocultaba prendas de vestir debajo del carrito de su bebé. Al ser advertida la maniobra por las cámaras, se le exigió al llegar a caja la devolución, negando sus intenciones. Para evitar el escándalo, la mujer que se dedica a la docencia, llamó a un allegado que terminó abonando lo sustraído con tarjeta de crédito por un monto cercano a los tres mil pesos.