De acuerdo con las cifras del INDEC, en febrero una familia necesitó 3,3% más para no ser caer en el nivel de la pobreza.
A contramano de la meta inflacionaria a la baja fijada por el gobierno, la Canasta Básica Total -que incluye alimentos, tarifas de servicios públicos e indumentaria- arrojó en febrero la suba intermensual más alta en un año. Hasta hora, el registro más alto había sido un 3% en marzo de 2017.
El costo de todo lo que una familia tipo, compuesta por dos adultos y dos menores, necesitó para no caer debajo de la línea de pobreza fue de $17.537,88, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Por su parte, el valor de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) aumentó en febrero un 2,9%, por lo que la misma familia tipo necesitó contar con ingresos por $6.987,20 para comprar la cantidad mínima de alimentos y no caer en situación de indigencia.
Ambas mediciones aumentaron durante el primer bimestre del año un 5,2%, lo que significa un tercio de la meta inflacionaria que figura en el Presupuesto nacional (revisado en enero por el gabinete, cuando el objetivo se aumentó de 12% a 15% en 2018).
Con estos números, en los últimos doce meses la CBT acumuló un incremento de 24,2% y la CBA una suba de 28,3%.
Indice de pobreza
Este miércoles el Indec dará a conocer el índice de pobreza e indigencia del último trimestre de 2017, año en que la economía creció el 2,9% y la desocupación bajó hasta el 7,2%.
El anterior índice -correspondiente al segundo semestre de 2016-, primer relevamiento durante el gobierno de Mauricio Macri, había arrojado un Índice de pobreza del 32,2%, mientras que el nivel de indigencia fue del 6,3%.
En el primer semestre de 2017, el Índice de pobreza se había ubicado en el 28,6%, lo que representó cerca de 13 millones de personas.
De acuerdo con el informe del Indec, la Canasta Básica Alimentaria se ha determinado tomando en cuenta los requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para que un varón adulto, de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, cubra durante un mes esas necesidades. Mientras que para determinar la Canasta Básica Total (CBT) se amplía la CBA, considerando los bienes y servicios no alimentarios. La estimación se obtiene mediante la aplicación del coeficiente de Engel (CdE), definido como la relación entre los gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de referencia.
La CBA se valoriza cada mes con los precios relevados por el Índice de Precios al Consumidor del Gran Buenos Aires (IPC-GBA).