Subió la imagen con la leyenda: «Nunca hay que olvidar de donde venimos» y explotaron las redes con seguidores que le mandaron hermosos mensajes.
Este es el año de Lizy Tagliani. No sólo la rompe con su unipersonal Liberate en el teatro América de Mar del Plata, donde está en los primeros lugares de venta de entradas, sino que se luce todas las noches en la nueva tira de El Trece, Quiero vivir a tu lado.
Sin embargo, trabaja todos los días para no creérsela y mantiene una relación de ida y vuelta con sus seguidores en las redes sociales. Por eso no sorprendió que sintiera nostalgia por su pasado y compartiera fotos de su niñez, cuando era un nene que se llamaba Edgardo Luis.
Al lado de la foto Lizy escribió: «Nunca hay que olvidar de donde venimos …» y de inmediato recibió una catarata de saludos y felicitaciones de sus seguidores. Y le dejaron mensajes como «No cambies nunca» o «Me encantan las personas genuinas q no reniegan de lo q fueron ni de lo q son, jamás cambies tu esencia Xq es lo q te hace única».
Al rato compartió otra imagen en brazos de su madre, con su padre al lado. «A ellos le debo todo… Mi vida desde el principio al final», escribió. «Me sentía mujer desde siempre. A los siete años, cuando era nene y me puse una pollerita escocesa por el día de la raza en el colegio, les dije a mis papás: ‘A partir de ahora, me quiero llamar Carla Marina Marconi'», contó alguna vez en una entrevista.
También había dicho que «Mis padres ya se daban cuenta. Después de eso, jugué toda mi vida sola, al elástico, a la rayuela. Quería jugar con las nenas pero no me integraban porque era nene y los varones me rechazaban por ser diferente».
En otra ocasión confesó que en su adolescencia se la pasaba vestida de mujer en su casa. Pero en el colegio no pasaba lo mismo. Allí iba como Luisito por miedo a que le peguen y discriminen. «Mi mamá me contó que mi viejo estaba orgulloso de mí, pero que tenía miedo de que me mataran y que no vuelva con vida a casa», añadió.
Se llama Federico de Nichilo, tiene 35 años, es peluquero y nacido en Mar del Plata. Conoció a la diva en la temporada de Villa Carlos Paz, cuando a fines de diciembre la comenzó a peinar para su espectáculo Lizy Tagliani Recargada.
“Primero fuimos peluquero/estrella, después pasamos a ser buenos conocidos y luego amigos. Acabábamos de romper con nuestras parejas de entonces y empezamos a ser más confidentes, contándonos nuestras penas de amor. ¡Hasta que un día me lo chapé! Y me di cuenta de que estaba enamorada de él, pero no lo quería presionar. No soy una mujer naturalmente encaradora como Moria, que les pega un palazo y se los lleva a su casa. Así que nos tomamos nuestros tiempos, y a mediados de febrero del año pasado nos pusimos de novios”, contaba en una entrevista.